jueves, 16 de enero de 2014

   
DICTADO DEL 13 DE ENERO
Cuando Phileas Fogg salió de Londres, sin duda no sospechó la grandísima repercusión que iba a tener su marcha. Rápidamente la noticia de la apuesta se extendió por toda la asociación o club y produjo una auténticaconmoción entre los miembros del honorable círculo. Más tarde, la conmoción pasó del club a los periódicos a través de los reporteros, y de los periódicos al público de Londres y de todo el Reino Unido.

   Unos tomaron partido por Phileas Fogg y otros, que pronto formaron una considerable mayoría, se pronunciaron contra él. Dar lavuelta al mundo en un tiempo mínimo y con los medios de comunicación existentes en aquel momento, no solamente era imposible, sino que era demencial.